En el centro de Fuerteventura, la segunda isla con mayor proporción de las Islas Canarias, se sitúa el Barranco de las Peñitas. Es una de las rutas más apreciadas por su alto interés paisajístico más típico de Marruecos que de las islas. Además, se encuentra dentro del Espacio Natural Protegido del Parque Rural de Bentacuria.
Su recorrido es sencillo, no tiene distancias ni pendientes elevadas, por lo que es apta para todos los públicos, siempre y cuando se tomen las debidas precauciones.
Esta ruta destaca por sus impresionantes rocas que rodean la presa de Las Peñitas, una variedad flora y fauna autóctona y grandes barrancos de hasta 150 metros de altura. Sus increíbles paisajes han sido escenarios de muchas películas cinematográficas.
Una ruta de gran interés histórico y cultural
El Barranco de las Peñitas es una ruta circular que tiene una duración de dos horas con un total de casi 4 kilómetros. Tiene una dificultad media, hay que tener cuidado con las rocas, por lo que no es recomendable para personas con movilidad reducida.
La ruta comienza en el pueblo de Vega de la Peña. Una vez aquí, hay que dirigirse, bien andando o en coche, hasta llegar al Restaurante Casa Naturaleza. Es fácil de localizar, ya que se encuentra en las afueras del pueblo. El restaurante cuenta con parking, por lo que se podrá estacionar el coche e iniciar la ruta caminando.
Una vez en camino, se podrá ver un grupo de palmeras enormes, similar a un oasis. Cuando se atraviese este pequeño bosque, se podrá continuar la ruta de dos maneras, bien tomando el sendero que recorre todo el Barranco por la ladera de la izquierda; o bien cruzando el barranco a través del cauce. Aunque es recomendable seguir el sendero.
A medida que se avanza por el cauce, se podrán ver pequeñas pozas, saltos de agua y una abundante vegetación, con especies endémicas como el tarajal (arbusto de entre cinco o seis metros de altura con flores rosáceas), el acebuche (olivo silvestre) o el tamarisco (arbusto exótico).
Cuando se haya atravesado el bosque, se observará la Ermita de la Virgen de la Peña, situado a mitad del Barranco. Aquí se podrá disfrutar de unas vistas de asombro con paredes que alcanzan los 150 metros de altura. En este punto afloran grandes bloques de rocas plutónicas y volcánicas, como sienitas y dioritas.
Dejando atrás la Ermita se llegará al final del Barranco donde se encuentra la Presa de Peñitas, que fue construida tras la Guerra Civil Española. Actualmente, está repleta de sedimentos, por lo que no recoge agua. Sin embargo, es una zona perfecta para realizar escalada libre, es frecuente ver escaladores.
Para realizar esta ruta necesitarás calzado cómodo, como botas de campo o zapatillas especiales para hacer senderismo. Es recomendable llevar una botella de agua para hidratarse, gafas de sol, gorra y crema solar. No olvides tampoco unos prismáticos para observar mejor el entorno y la fauna.